quinoa es sostenible

No es culpa de los veganos si la quinoa no es sostenible

¿Qué relación hay entre la insostenibilidad de la quinoa y los veganos? Ninguna, y es un error pensar lo contrario.

Algunos alimentos, como el aguacate y la quinoa, se utilizan a menudo como argumentos contra los veganos. Estos productos, desconocidos en Italia hasta hace unos años, han ganado popularidad recientemente y ahora están disponibles en supermercados y algunos restaurantes. Probablemente más de una persona se haya encontrado con la mirada interrogativa de un padre o una abuela que observa con perplejidad un plato lleno de ingredientes desconocidos. Esto ocurre porque, desafortunadamente, este tipo de alimentos, casi siempre de origen vegetal, se han asociado desde el principio exclusivamente con una dieta vegetariana o vegana, y no con una alimentación variada que pueda incluir a todos.

El mal hábito de crear divisiones donde no hacen falta

Hay algo que no beneficia a nadie y, sin embargo, sucede cada vez que surge un tema mínimamente divisivo: dividirse en bandos. Esto es exactamente lo que ha ocurrido y sigue ocurriendo con respecto a la elección vegana: todo debe encasillarse en una u otra categoría – veganos o no veganos. La quinoa es un ejemplo clásico de este mecanismo, ya que a menudo se asocia únicamente con la alimentación de quienes no comen carne, sin una razón precisa, salvo la de dibujar una figura estereotipada del vegano que sigue las modas new age y que solo consume alimentos con nombres extraños, como el cous cous o el guacamole.

¿Qué pasa con la quinoa?

La división mencionada anteriormente se convierte en un abismo cuando surgen los problemas relacionados con el cultivo de ciertos alimentos, como precisamente la quinoa. Cuando alguien lee que, por ejemplo, el auge de la fama de la quinoa ha impulsado a los agricultores a producirla utilizando maquinaria que antes se destinaba al procesamiento de otros productos, lo que ha provocado un desperdicio de agua y energía, o que el cultivo de quinoa ha requerido un mayor uso de pesticidas en comparación con otros cultivos, los veganos se convierten en los culpables de la destrucción del planeta, como si se alimentaran de quinoa todo el día.

Los cultivos de quinoa también contribuyen a la destrucción del medio ambiente, especialmente en países como Bolivia o Perú, porque la alta tasa de cultivo de este alimento ha provocado la pérdida de nutrientes en los suelos y, en consecuencia, la erosión del terreno, además de aumentar el riesgo de desertificación, algo que, en plena crisis climática, no resulta tranquilizador.

Entonces, ¿quinoa o no quinoa?

¿Deberíamos dejar de consumir quinoa, seamos veganos o no? Ese no es el punto. El punto es cerrar esa brecha que no lleva a ninguna parte ni desde el punto de vista social ni ambiental, y unirse para encontrar soluciones (donde aún no las haya o no se estén aplicando) y exigir con firmeza leyes y normativas que las promuevan y protejan. Luchar a favor o en contra de la quinoa o el aguacate, enfrentarse para ver quién lo hace mejor o quién es más culpable, dividirse en lugar de crear una masa crítica nunca ha sido útil y no lo será: para un cambio real es necesario estar unidos y compactos, y dejar de atribuir a los veganos culpas de cosas con las que, de hecho, no tienen nada que ver.

Leer más artículos